“Traducir es dar una señal que otro quiso transmitir”: Indira Díaz
Iván FRUTIS | El compilado destaca a los autores NokitaSungatov, EvgeniaSuslova y Pavel Arsenev

“Traducir es dar una señal que otro quiso transmitir”: Indira Díaz

Junio 28, 2018

"Yo creo que como siempre pasa con todo poeta, poesía o movimiento poético, si es más o menos consistente va a generar sus instituciones, ya sea una revista o un premio, entonces en el caso de la antología está basada en premios importantes de Rusia como el Andréi Bely", comentó la traductora Indira Díaz a propósito de la reciente publicación de Puente y precipicio. Última poesía rusa, editado por Círculo de Poesía.

¿Cómo surge tu relación con la cultura rusa? en qué momento o fue por un autor o qué fue lo que te conectó con esto, por qué ya no es un asunto de hacerlo sólo por gusto, me parece que se trata de transmitir una tradición

-Yo creo que se trata de las primeras cosas que vi cuando se despertó en mí el interés por leer, yo no era muy grande cuando me encontré con Dostoyevski y como me gustó mucho, yo me acuerdo que tenía 12 años, me gustó muchísimo y la verdad es que leí algo muy sencillo de Dostoyevski, Las noches blancas, y toda esa atmósfera rusa me gustó tanto a esa edad que empecé a buscar lo que había de él en mi casa, y buscar a otros autores rusos, así me encontré con otro título de Dostoyevski, El idiota, además, encontré libros de Gogol, de Gorki, empecé a leer a los rusos y yo no salía de ahí, todo lo que leía por esa época eran rusos, si no era ruso no servía. Supongo que fue como incorporar la tradición rusa por medio de la lectura, después, ya más adelante, en la universidad vino una chica rusa de intercambio y abrió un curso de ruso, pero esto ya fue hace mucho tiempo, en 2008 el primer curso.

A propósito de la publicación Puente y precipicio me gustaría que nos contaras ¿cómo surgió la idea?

-Sí, se estaba haciendo el dossier, que empezó en 2016. El asunto es que Círculo de Poesía intenta publicar lo más reciente, acercar la poesía nueva de todo el mundo. Yo, antes ya había colaborado en la revista haciendo otras traducciones, pero no era nada específico, eran traducciones, por ejemplo, de Igor Irteniev, Elena Shvarts, StanislavLvovsky, que son poetas rusos muy destacables, pero sin mucha difusión en español, luego de esto, un día se me ocurrió traducir a una poeta muy joven; y platicando con Alí Calderón, editor de la página, me dice "¿te parece si lo anuncio como un dossier y le damos seguimiento?". Y así lo hicimos, son 10 o 12 quizás los poetas que están en el dossier, pero el asunto de esto era que fueran poetas muy jóvenes nacidos entre la década de los 80 y 90, el más joven que se publicó nació en el 96.

En estos albores mundialistas, te preguntaría, ¿quién fue la primera poeta que tradujiste?

-Fue Daría Serenko, de quien también aparecen poemas en la antología.

Y a partir de ese momento es que Alí te propone el dossier, pero hay traducciones de muchos más poetas ahí, ¿puedes hablarnos de ellos?

-Lo que pasa es que en el dossier la idea era tener un espacio para Rusia en la revista, pero claro vamos publicando, le parece interesante y se da cuenta de que tiene muchas visitas la revista cuando salen los poetas rusos, de que la gente está interesada en la poesía rusa. Y hablando de nueva cuenta, me propone hacer una antología, la cual surgió como plan en 2017, durante el Encuentro Internacional de Poesía de Ciudad de México. Yo ya tenía a ciertos poetas ubicados, por lo mismo del dossier y por estar leyendo la poesía reciente, ya que a mí me llegan antologías de poetas rusos, por ejemplo, yo me acuerdo que muchos de estos salieron porque en Rusia hay una especie de festival que se llama Pushkinskie Laboratorii, donde se presentan los poetas y presentan su trabajo y hay actividades entre ellos. De este evento, conocí a Daria Serenko, NikitaSungatov, IvanSokolov, quienes estaban trabajando en conjunto con PolinaBarskova entonces encuentras conexiones y te pones a buscar su trabajo; eso pasa mucho con los que son muy jóvenes, aquellos nacidos en los 90 que algunas veces no son encontrados en una antología como tal, aunque sí tienen sus propios libros publicados.

¿Qué estabas pensando cuando traducías los poemas, en el sentido de que hay una idea que es transmitir la tradición justamente como la etimología de tradere, y la otra que es una traducción mucho más literal, en qué piensas tú cuando te pones a trabajar en las traducciones?

-Pues siempre tiene que ver con este asunto de transmitir la idea, me ha tocado que los rusos leen mi traducción y me dicen, "sabes que me parece que está muy bien todo este asunto de transmitir la idea". Uno de los poetas que aquí incluyo, Danila Davydov, dice, acerca de la escritura de la poesía, que le parece que el poema en general está expresando un sentimiento, pero los sentimientos no pueden llegar a ser expresados por medio de nada, ni por medio del discurso, ni por algún artificio con el lenguaje poético, sino que tú tienes que pensar que en el poema por lo menos debe existir esa reminiscencia que te dé una señal de que existió el sentimiento. Es algo parecido a lo que pasa cuando traduces, debes de intentar por lo menos dar la señal de que está lo que él quería transmitir. Traducir es dar una señal que otro quiso transmitir.

Pasando a la antología, eso es todo un recorrido, como bien dice el título, la última poesía rusa a partir de la segunda mitad del siglo XX y principios del siglo XXI, ¿cuál fue el método de selección Indira?, ¿cómo es que te decides cuáles entre toda esta gama de discursos poéticos que elegiste?

-Bueno, yo creo que como siempre pasa con todo poeta, poesía o movimiento poético, si es más o menos consistente va a generar sus instituciones, ya sea una revista o un premio, entonces en caso de la antología parte de ella está basada en premios importantes de Rusia como el Andréi Bely.

Pero digamos, ¿sacaste a todos los que son premiados o ya después puliste un poco de tantos nombres?

-Sí, claro. Hubo varias listas antes de la definitiva. El criterio era estar en alguna de las revistas que difunden a los poetas más nuevos, pero que también son autores que tienen un sentido más académico dentro de la poesía rusa porque algunos de los poetas más jóvenes que aquí están son filólogos, eso en cuanto a la generación más próxima, porque la anterior son poetas que ya están consagrados, o sea, nacer en los 40, tener 60 o 70 años ya es una edad consagrada para los poetas, creo que ahí no había tanta dificultad con identificar a los poetas que están siendo importantes, nombres importantes. Los premios fueron un parámetro para las generaciones más jóvenes porque es un indicador de una poética interesante, lo importante para este momento.

Pienso por ejemplo en estos nombres Marina Tsvietáieva, Joseph Brodsky o Anna Ajmátova, ¿tú podrías vislumbrar algunos, aventurarte a ver en la antología algún nombre que pudiera traspasar estas barreras temporales?

-Si lo pienso un poquito pues podría decir Nikita Sungatov, podría pensar en Evgenia Suslova, que realmente tiene una poesía muy interesante y también podría pensar en Pavel Arsenev.

Con respecto a las complejidades a las que te enfrentaste, ¿cuál fue el que te costó más trabajo transmitir o dejar la marca de lo que su poesía significa en ruso y pasarlo al español?

-Yo creo que me pasó mucho con la generación de los 50 y 60, no sé si es porque de pronto uno no encuentra la afinidad con esas cosas o precisamente porque es cuando cambian las formas. Yo también tengo traducidos algunos poemas de Tsvietáieva, de esta generación, tambiénAjmátovapor ejemplo y tienen una forma distinta de escritura en ruso. Cuando empiezan a cambiar las poéticas, estos poetas que vienen más tarde, entonces de pronto tienen algún juego con la sintaxis, estos asuntos de crear palabras, también eso de que no podemos perder tanto el ritmo de un poema ruso porque dice demasiado, también tenemos esto de no traducir en rima, algunos siguen rimando porque el verso libre,para algunos críticos bastante tradicionalistas, es como una señal de occidentalización y la cultura rusa es una cultura que intenta ser muy tradicional, claro que algunos de los que están aquí no escriben ya con rima, ya no lo hacen. Yo creo que las dificultades a la hora de traducir son más estructurales, si entiendes lo que hay que arrojar pero de pronto hay que encontrar la forma también, parte de la traducción es intentar que suene bien también en tu lengua.

A propósito de esto que dices, está el poema que se llama Brasil, ¿me puedes contar un poco de eso?

-Natalia Azarova, que es la autora del poema, está en un punto de experimentación, ella lo hace con los sonidos en el poema, yo creo que este trabajo, que no puedo decir que fue tan difícil por qué realmente algunas de las palabras en el original están en portugués, y no hay mucho problema con conservar el ritmo, pero la disposición en la que pone las palabras, la amplitud de la palabra o sea lo largo que puede llegar a ser no está tan desproporcionado en español respecto a su original en ruso, entonces se puede conservar un poco el sonido y si lo lees, sí mantiene cierto ritmo. También hay un vídeo de su trabajo, donde va leyendo, está pasado como por filtros, como si fuera una canción.

Me gustaría que me contaras un poco sobre lo que te encontraste, digamos como los movimientos, es decir, ¿que es lo que podemos encontrar, cómo se establecería una categorización de lo que tú lograste compilar en este Puente y precipicio?

-Bueno, por lo menos aquí hay uno que puedo recordar, es Yuri Kublanovsky que perteneció al grupo literario Smog que es de los que publicaban en algo llamado Samizdat, que se da entre 1960 y el 1989. Sam significa uno mismo e izdat, editar o edición, entonces es algo así como editado por sí mismo. Durante esta etapa, el régimen soviético no permitía algo que no reflejara el realismo socialista, si no pasaba lo que sucedió con Brodsky que fue acusado de parasitismo literario, no se podían transmitir otro tipo de ideas en los poemas, no se podía ir hacia algo personal o sentimental, un poco antes empieza una fase que llaman fase deshielo, que viene con Jrushchov, ahí se declara que la poesía puede circular y todo, pero la libertad sólo la hay por debajo,y por eso se publica en samizdat. Ya después de eso tú no puedes encontrar categorías muy claras de la poesía rusa, pero si se puede notar que los poetas se ocupan de problemas identificables como en el discurso, qué tanto puede transmitir el discurso y cuáles son sus límites.

Los primeros que publican en Samizdat están haciendo una crítica sobre éstas limitaciones que le dan al lenguaje están intentando hacer una sociocrítica, claro también circulan poemas sentimentales. Después de eso ya vienen cambios, entre los ochentas y los noventas que están estas tendencias de la Poesía de lo Concreto y el Conceptualismo, que van revisando sobre las posibilidades estéticas del lenguaje y van retomando elementos de su propia tradición como por ejemplodel Futurismo y también está lo de la poesía socioirónica que en la antología está representada con Igor Irteniev, la crítica que es muy dura en Rusia los catalogó de posmodernos porque incluían lenguaje obsceno y hablaban de una forma satírica e incorporaban citas rehechas.

Esta antología cuenta además con la aparición del poeta AndreiRodionov, que hace unos poemas para las PussyRiot

-Es un poeta muy interesante porque la aparición de su obra en la revistas coincide con la del slampoetry, justo a principios del 2000 aquel que se hace en Moscú y en las grandes ciudades de Rusia y él es quien organiza estos festivales hasta ahora en Rusia, a parte también es vocalista de un grupo de rock llamado Okraina, es un poeta nacido en 1971 y destaca por la introducción del Slam y por ser un promotor de poesía joven y mover mucho la escena cultural en Moscú pues también trabaja con teatro.

¿Cómo eligieron el título, que por cierto es muy bueno?

-Leyendo en la crítica rusa, por ahí recuerdo haber leído que a menudo los críticos caracterizan a la poesía contemporánea rusa como un precipicio, me refiero a la generación de los nacidos a partir de los cincuenta, y porque en efecto la poesía estaba cambiando era un arrojarse, un dejarse ir y no saber que resultaría, pues estos poetas desafiaban las formas de escritura tradicionales, estaban haciendo algo diferente. Así que de ahí surgió la idea. Y eso es, es un puente que se nos tiende para acercarnos a esta nueva poesía y un precipicio que tiene que ver con ese arrojo de nuestro propio desconocimiento.